El masaje infantil es una manera eficiente de conectar con tu bebé. Puedes transmitirle afecto mediante el tacto y al mismo tiempo brindarle beneficios físicos y psicológicos como el desarrollo de la confianza y la comunicación no verbal con el recién nacido.

Dar masaje a tu bebé tiene un efecto positivo en la relación que estableces con él o ella. Las madres que dan masajes a su bebé habitualmente tienen mejor auto imagen, son más positivas, seguras de su rol materno, comparten más el rol de paternidad con su pareja, se explica en un estudio del Instituto Superior de Ciencias de la Salud Egas Moniz, de Portugal; además los bebés que reciben masajes tienen un vínculo más fuerte con mamá o papá y muestran una disminución en los niveles de ansiedad por separación.

¿Cómo dar masaje a un recién nacido?

• Elige un momento del día adecuado, ya sea antes de dormir o después del baño, para que tanto tú como tu bebé logren un estado de relajación.
• Asegúrate de que la habitación donde se encuentren esté cálida.
• Puedes posicionarte en una cama o colchoneta de manera que tu bebé esté cómodo y seguro.
• Ten al alcance lo que puedas necesitar: aceite, paños, ropa
• Lava bien tus manos y retira las joyas que lleves puestas o cualquier accesorio que pudiera incomodar a tu bebé

El uso de aceite te ayudará a reducir la fricción, a conservar el calor y sobre todo a cuidar la piel de tu bebé. Por ello lo mejor es utilizar aceites para bebé, que ya han sido formulados específicamente para cuidar y proteger la piel de tu hijo o hija.

Tipos de masajes para bebés

Masajes de estimulación motriz: Para estimular la extremidades del bebé sólo tienes que colocar al recién nacido boca arriba y hacer movimientos circulares con las manos en sentido de las agujas del reloj, en articulaciones, brazos y piernas. 

Masaje para el estreñimiento: El estreñimiento es un padecimiento muy común, sobre todo en niños que son alimentados con leche de fórmula. Lo que debes hacer es colocar a tu bebé boca arriba y masajear su abdomen, no olvides el calentar aceite con tus manos.

Presta atención a la parte central del abdomen, mueve tus manos de un lado al otro así activarás sus órganos internos, si te enfocas en la zona inferior, debajo del ombligo, trabajarás sus intestinos.

Masajes para ayudar al bebé a expulsar los gases: Si notas que tu hijo llora después de alimentarse, puedes ayudarlo a expulsar esos gases con un masaje, recuesta a tu bebé sobre su espalda y con tus palmas abiertas a la altura de su ombligo desliza tus manos lentamente hacia arriba y hacia abajo.

Masajes para quitar los cólicos del lactante: Los cólicos del lactante se producen debido a la contracción brusca de los músculos intestinales, lo cual ocasiona dolor en la zona y en consecuencia el llanto del niño. Con este masaje puedes aliviar los cólicos de tu bebé, recuéstalo con el rostro hacia arriba, coloca tus manos en su abdomen y realiza pequeños movimientos circulares.