El rol que tiene el padre dentro de la crianza ha cambiado con los años, antes él era el proveedor, la figura de poder y autoridad en la mayoría de las familias. Actualmente, más mujeres aportan dinero a casa y más padres buscan involucrarse a fondo en la crianza de sus hijos.
El padre, al igual que la madre, es una figura de suma importancia para el desarrollo emocional, físico y social de los niños. Incluso en la adolescencia, tener a ambos padres cerca es necesario para los jóvenes.
¿Por qué es importante la figura paterna?
Para muchos, papá es la figura con la que crecemos sintiéndonos seguros y protegidos. El rol paterno brinda a la familia estabilidad. En muchos casos, esta figura es representada por un abuelo, un tío o algún hombre cercano y aunque los padres estén separados, el padre debe seguir presente ya que su participación activa en la crianza es fundamental porque:
- Formación de la personalidad e identidad de sus hijos. Se ha demostrado que cuando un padre participa activamente en la vida de su hijo, a través del juego, del cariño, de escucharlo y pasar tiempo con él, el niño se siente motivado, valorado, querido y esto lo ayuda a tener confianza en sí mismo, y de esta manera, logra formar su propia identidad partiendo de la primera figura masculina que tiene en casa.
- Es una figura de autoridad. La figura paterna, suele ser más firme al poner los límites y la disciplina, con esto los niños asimilan que hay reglas, lo cual ayuda a trabajar con el autocontrol y la tolerancia ante cualquier situación difícil que se le presente. Incluso con el padre se hacen negociaciones para que a veces esas reglas puedan romperse o alterarse y esto le servirá a los niños más adelante, incluso para no ser tan rígidos en algunos aspectos de su vida.
- El primer maestro. El padre, o la persona que ejerce la figura paterna, saben ser excelentes maestros para sus hijos; desde que sostienen las manos del bebé para sus primeros pasos, hasta enseñarles a andar en bicicleta, jugar con la pelota o volar un papalote. La actitud del padre en estas situaciones nos enseña a ser perseverantes y aprender a luchar por lo que queremos.
Beneficios de crecer con ambos padres
Cuando un niño crece con una figura paterna y una materna, que pasan tiempo de calidad con él o ella conversando, jugando, enseñando activamente en su crecimiento, esto tiene grandes beneficios en su vida, tales como:
- Tienden a tener menos problemas de comportamiento.
- Desarrollan una mayor capacidad intelectual.
- Tienen buena autoestima.
- Buen desempeño académico.
- Tienen mejores habilidades sociales
- Enfrentan mejor las adversidades de la vida.
Los niños necesitan crecer junto a su padre y madre, o bien contar con ese abuelo o tío que represente la figura paterna en el niño, ya que cada uno aporta cosas distintas al desarrollo y educación de su hijo que son esenciales para convertirse en un adulto feliz, responsable y con una buena inteligencia emocional.
contenido relacionado
También te podría interesar