A través del sentido del gusto, tu bebé empezará a explorar y conocer el mundo. Incluso antes de comenzar a comer alimentos sólidos, las papilas gustativas de tu bebé ya están desarrolladas y le ayudarán a descubrir si le gustan o no algunos sabores y texturas.

El sentido del gusto comienza a desarrollarse en el útero. A las 9 semanas de embarazo, la boca y lengua de tu bebé se han formado junto con las primeras papilas gustativas.

Tu bebé respira y se alimenta a través del líquido amniótico. Así, los sabores de los alimentos que comes y de lo que bebes pasan a través del torrente sanguíneo hacia el líquido amniótico.

A medida que tu bebé prueba el líquido amniótico, tiene su primera experiencia con varios sabores. Después del nacimiento, las nuevas papilas gustativas de tu bebé son muy sensibles. Puede reconocer los sabores agridulces, pero prefiere los dulces. Esta es una razón por la que le encanta el sabor de tu leche materna.

El sentido del gusto de tu bebé de los 0 a 3 meses

En esta etapa, el sentido del gusto de tu bebé es muy sensible. De hecho, puede tener una distribución más amplia de papilas gustativas en la boca que un adulto. Las papilas gustativas en los recién nacidos se pueden encontrar en las amígdalas y la parte posterior de la garganta, así como en la lengua.

Durante sus primeros tres meses, su bebé puede distinguir entre sabores dulces y amargos.

El sentido del gusto de tu bebé de los 3 a 6 meses

A los 3 meses de edad, la lengua de tu bebé ha crecido. Puedes notar que se lleva cosas a la boca, como juguetes o sus cobijas. Esto muestra que está usando su lengua para tratar de dar sentido a diferentes texturas y sabores.

Alrededor de los 5 meses, el sentido del gusto de su bebé ha cambiado y puede reaccionar más a los sabores salados. Sin embargo, no es una buena idea darle a su bebé alimentos salados en esta etapa.

El sentido del gusto de tu bebé de los 6 a 12 meses

Después de seis meses de que le has dado leche materna, los nuevos sabores sorprenderán a tu bebé cuando le das alimentos sólidos. Al principio, es natural que tu bebé sospeche del sabor de la comida, pues está acostumbrado al sabor dulce de la leche.

Una vez que coma alimentos sólidos, probablemente descubras que a tu bebé le encanta el sabor de algunos alimentos nuevos de inmediato. Es probable que también rechace ciertas cosas, y es posible que tengas que ofrecerlos en varias ocasiones. Los expertos sugieren ofrecer un nuevo alimento al menos ocho veces antes de decidir que no le gusta a tu hijo o hija.

¿Tu bebé heredará tus preferencias de sabor?

No necesariamente. Sus gustos están influenciados por todo tipo de factores, solo algunos de los cuales son genéticos.

Tu bebé puede preferir los alimentos a los que estuvo expuesto en el útero, pero también tenderán a gustarle los alimentos a los que empieces a acostumbrarlo. Si ofreces una variedad de alimentos, es más probable que continúe comiéndolos a medida que crece.

Recuerda que él o ella te observa e imita lo que haces, incluido tus reacciones a la comida. Por lo tanto, es una buena idea disfrazar cualquier disgusto fuerte que tengas para alimentos particulares, especialmente alimentos saludables que estás tratando que tu hijo o hija ingiera.