La coordinación es la capacidad de mover ordenadamente ciertos músculos, nervios y huesos, para realizar una acción deseada. Recibir una adecuada estimulación es muy importante para desarrollar habilidades y destrezas que permitan realizar actividades de forma independiente, por esta razón es esencial que tu hijo o hija la practique. 

Aunque tu bebé sea muy pequeño, existen formas de estimularle para practicarla. A continuación, te compartimos algunas maneras: 

Acuesta boca arriba a tu bebé, muéstrale sus pies e invítale a tocarlos. Puedes usar pulseras de cascabeles o calcetines con sonaja incluida. 

Además de practicar la coordinación motriz, esta actividad le ayudará a conocer y descubrir partes de su cuerpo como sus piernas y pies.

Si tu bebé tiene más de seis meses, unta un poco de papilla sobre una mordedera suave y con relieves; si tiene menos de esta edad, vierte unas gotitas de leche materna. 

Al llevarla a su boca estarás favoreciendo su coordinación ojo-mano, además de permitirle explorar texturas y sabores. 

Coloca a tu bebé boca abajo sobre el suelo o la cama, pon las palmas de tus manos en las plantas de sus pies para que sienta el apoyo e intente empujarse para desplazarse por el suelo. Si es muy pequeño, puedes acomodar sus brazos al avanzar; de esta manera aprenderá que debe ponerlas al frente al estar en esta posición.

Esto le ayudará a coordinar y obtener fuerza en sus brazos y piernas, asimismo, empezará a tener nociones sobre el desplazamiento independiente, lo cuál impactará positivamente despertando su curiosidad.

La adecuada estimulación temprana puede favorecer el desarrollo de tu bebé, además, pasar tiempo juntos promoverá las relaciones afectivas y le enseñará las bases de la socialización. Invita a papá u otro miembro de la familia a realizar estas actividades con tu pequeño o pequeña.