Darle a tu bebé su primer vaso entrenador es un momento especial, pues marca un paso más en su desarrollo. Cuando tu bebé tenga las habilidades motoras para sostener un vaso, pero no las habilidades para evitar que la bebida se derrame, un vasito de entrenamiento puede darle algo de independencia mientras se mantiene limpio.

De acuerdo con la Academia Americana de Pediatría, la mayoría de los bebés están listos para comenzar a beber de un vasito de entrenamiento entre los 6 y 9 meses. Lo mejor es eliminar el uso del biberón alrededor de los 12 meses, pues entre más tardes en hacerlo, tu hijo o hija generará más apego y será más difícil.

¿A qué edad puede un bebé usar un vaso entrenador?

Se recomienda enseñarle a tu bebé a usar un vaso entrenador a los 9 meses, para que tenga tiempo de acostumbrarse a utilizarlo antes de quitarle por completo el biberón. No es una buena idea quitarle el biberón de un día para otro, ya que esto podría hacer que tu pequeño o pequeña vea el vasito como un castigo, en lugar de como una meta de desarrollo.

Los vasos entrenadores pueden ser una excelente manera para que tu bebé pase de la lactancia o la alimentación con biberón a una taza o vaso normal. 

¿Cómo empezar a usar el vaso entrenador?

Al principio, solo debes ofrecer agua o jugo en el vaso para que tome de ahí durante las comidas. Luego, a medida que él o ella se sienta más cómodo, comienza a llenarlo con leche materna o fórmula para que se acostumbre a la idea de que todas sus bebidas pueden provenir de un vaso entrenador.

Sostén el vaso contra su boca y deja que caigan unas gotas. No lo obligues a tomar más de lo que quiere. Si tu hijo o hija intenta agarrar el vaso para tomar solo, deja que lo haga.

El uso del vaso entrenador para bebé es un momento significativo ya que ayuda a tu bebé a ser más independiente. Haz de este cambio en sus hábitos una experiencia divertida y gratificante.