Con ayuda de la estimulación temprana podrás impulsar a tu bebé para cumplir con importantes hitos del desarrollo; al notar que tu hijo o hija muestra interés por realizar ciertas actividades como gatear o ponerse de pie, procura acondicionar los espacios y hacerlos seguros para ayudarle a lograrlo. 

Entre los 9 y 11 meses, los pequeños y pequeñas tienen muy despierta la curiosidad y desplazarse de forma independiente les ayudará a explorar y conocer su entorno. A continuación, te compartimos algunas actividades para estimular diferentes áreas: 

• Para mejorar su coordinación ojo-mano: permítele comer por sí mismo, ya sea usando una cuchara o explorando texturas con sus manos. Esto ayudará a su motricidad fina. 
• Si tu bebé gatea: arma circuitos en casa usando tapetes de foamy, almohadas y cobijas para crear obstáculos. Colócate en algún punto y motívalo a atravesar la ruta completa. Además de estimular sus habilidades motoras, gatear favorece las conexiones neuronales. 
• Para las y los niños que siente curiosidad por trepar: coloca un tapete de foamy, una cobija gruesa, colchoneta, almohadas o un tapete para yoga al pie de la cama o de un sofá, después, motívale a escalarlo. Con esto ejercita diferentes áreas: motricidad gruesa al usar sus brazos y piernas; la coordinación y el equilibrio.  

Recuerda la importancia de permanecer a su lado todo el tiempo para evitar que caiga y se lastime.

Durante esta etapa es de suma importancia que cubras los enchufes eléctricos, coloques protección en las esquinas de los muebles, retires objetos que se puedan romper o productos de limpieza; de esta manera estarás tranquila de saber que el espacio es seguro para tu bebé. 

Si tu bebé tiene más de diez meses y todavía no gatea, no se arrastra, no se pone en pie o no muestra interés por hacer actividades de desplazamiento, consulta a tu profesional de la salud para identificar qué sucede.