Entre el primer y segundo año, un niño habrá desarrollado las habilidades motoras gruesas necesarias para comenzar a pedalear.
Un triciclo ofrece la oportunidad de fortalecer el sistema vestibular, que es el encargado del equilibrio. Este es el primer sentido que desarrollamos y es vital para la postura, el movimiento y el sentido de “centro” en el espacio, el tiempo, el movimiento, la profundidad y de uno mismo.
Pedalear fortalece los músculos de las piernas de tu hijo para caminar y correr, también ayuda con la coordinación, por lo que es una gran actividad para practicar.
Formas de fomentar el pedaleo:
- Establece un punto de inicio y un punto final para que tenga una meta que alcanzar.
- Anímalo a pedalear hasta el siguiente árbol o punto sin que alguien lo ayude.
- Si tienen un hermano o hermana mayor, pueden jugar a perseguirse.
- Se trabajan ambos hemisferios cerebrales al estar alternando pies al pedalear.
Beneficios de pedalear:
Existe un vínculo especial entre los niños y el pedaleo que nunca se puede romper. Los triciclos representan diversión, libertad y aire fresco, todo lo bueno de ser un niño. Por otra parte, es un pasatiempo saludable. Estos son otros beneficios de que tu hijo monte un triciclo:
- Desarrolla fuerza, equilibrio y bienestar en general. La actividad física ayuda a que tu hijo se mantenga sano.
- Fortalecimiento del corazón, los pulmones, los músculos y huesos de la parte inferior del cuerpo.
- Genera confianza y seguridad en sí mismo, al realizar una actividad donde depende poco de sus padres.
- Fomenta el movimiento que es la raíz del aprendizaje.
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