¡Muchas felicidades por tu embarazo! Ahora inicia una gran aventura en donde los cuidados personales y nutricionales son básicos.
La alimentación durante esta etapa es determinante para la formación de tu bebé y los nutrientes a consumir son indispensables.
Debes saber que en las primeras semanas se va a desarrollar el tubo neural que es una estructura que da pie al sistema nervioso central del embrión. Cuando hay una deficiencia puede desarrollar alteraciones como:
Labio leporino y paladar hendido: Se producen cuando un bebé se desarrolla en el útero. No se sabe la causa exacta, pero puede deberse a genes, factores ambientales, ingestión de alcohol, medicamentos, fumar y muy poca o nula vitamina B y ácido fólico durante el embarazo.
Espina bífida: Aparece en cualquier punto de columna vertebral si el tubo neural no se cierra completamente. Esto causa daño en la médula espinal y los nervios. Regularmente se puede diagnosticar durante el embarazo o tras el nacimiento del bebé.
Hidrocefalia: Se trata del exceso de líquido en el cerebro.
Anencefalia: Es cuando el bebé nace sin la parte frontal del encéfalo (prosencéfalo), ni la parte que procesa el pensamiento y la coordinación (cerebro).
Por ello, durante el embarazo el nutriente clave es:
Ácido Fólico: es una vitamina B que ayuda al organismo a crear células nuevas y al desarrollo y cierre del tubo neural. Consumirlo baja el riesgo.
¿Qué hacer?
Antes del embarazo puede prevenir hasta en un 90% los defectos del tubo neural, que son los que afectan el desarrollo del cerebro y médula espinal. Durante el embarazo debes consumir 400 mg diarios.
Recuerda que una alimentación equilibrada aporta los nutrientes adecuados para tu salud y te dará la energía que requieres para la gestación del bebé; y a él le aportará para su desarrollo.
Consultar a tu médico antes y durante el embarazo será de gran importancia para un óptimo desarrollo del bebé.
También te podría interesar