Las futuras madres deben cambiar su dieta y estilo de vida para beneficiar a su bebé. Por eso no es sorpresa que muchas se pregunten si pueden tomar café o bebidas que contengan cafeína.

La buena noticia es que sí, sí puedes tomar café mientras esperas un hijo. Pero debes limitar tu consumo.

La cafeína tarda más en descomponerse en el cuerpo durante el embarazo y llega al bebé a través de la placenta. El bebé en desarrollo no es el mejor para procesar la cafeína y puede aumentar los niveles de hormonas del estrés en tu hijo o hija.

No deberías preocuparte por estos efectos, pero como la cafeína no beneficia a tu bebé, puedes optar por dejarla durante nueve meses.

Limita la cantidad de cafeína que consumes cada día a 200 miligramos (dos tazas de café, por ejemplo) durante el embarazo. Las bebidas y los alimentos con cafeína incluyen café, té, bebidas energéticas, refrescos y chocolate.